MI SIGUIENTE MARATÓN
#072 - Me toca entrenar en verano
Menudo pedazo de clickbait así por la cara.
Para mis padres y todos sus amigos que están suscritos (forzosamente) a esta newsletter, explicaré lo que es un clickbait: es la forma de seducirte con drama barato para que hagas clic.
Por ejemplo: es como ese cartel en la calle que dice “¡Pizza GRATIS!”… y cuando entras, te dicen que era solo si compras 5 y bailas un vals frente al cocinero.
En Internet, el titular sería: “El truco que los médicos NO quieren que sepas”
Y resulta que el truco es… tomar agua.
A lo mejor te has metido en esta newsletter leyendo el título y has dicho: “Voy a ver dónde corre esta chica su siguiente maratón”
Bueno, pues no va a haber siguiente maratón, por el momento, porque estoy embarazada.
Los maratones van a tener que esperar.
¿Recuerdas que hace un par de newsletters te hablé acerca de apuntarse a las carreras con un año de antelación?
Como dije, en un año pueden pasar tantas y tantas cosas…
Lo bueno, es que sí que hay carreras que ofrecen alternativas. Me explico, para que lo entiendas mejor.
Este año estaba en mis planes estar embarazada, pero como sabrás, esto no es como pedir algo por Amazon, tú no programas la fecha de entrega y ya. Hay veces que hay que esperar muuuucho tiempo hasta que esto pueda suceder. Hay parejas que tardan y parejas que tardan menos.
Me apunté al maratón de Chicago (que va a ser en octubre de 2025) y, aunque siempre te apuntas a un sorteo de una major pensando “no me toca ni de coña”, también hay una parte que dice “¿y si sí?”
Tomé finalmente la decisión de apuntarme, por este motivo:

Si lees las políticas del maratón de Chicago, te permite posponer hasta tres años el dorsal si envías un documento médico explicando que estás embarazada o que has dado a luz recientemente. Tres años es un buen tiempo para que, después de lo que conlleva un parto y un posparto, tengas margen para prepararte bien, sin forzar el cuerpo y también hace que mantengas la ilusión por correr ese maratón.
Punto a favor de Chicago.
Por simple curiosidad, he estado revisando esta normativa en el resto de majors. Tanto Londres, como Berlín, como Nueva York, al igual que Chicago, te dejan tres años de margen.
Los maratones de Boston y Tokio, puedes aplazarlo hasta dos años.
La verdad, estas políticas muestran que los organizadores de los World Marathon Majors se están poniendo las pilas y cada vez apoyan más a las corredoras en momentos importantes de su vida, como el embarazo o el posparto y tienen verdadero interés en que se fomente la participación femenina en estos eventos.
¿Y en España? ¿También funciona así?
La respuesta corta es: NO.
Por ejemplo, en el maratón de Valencia, si tienes una lesión y presentas un certificado médico, te pueden hacer una devolución del 75 % o del 50 % (dependiendo la fecha de proximidad al evento), pero el embarazo no se menciona específicamente como motivo válido para la devolución. Además, no es posible transferir tu inscripción a otra edición del maratón.
Respecto al maratón de Sevilla, al inscribirte puedes pagar un extra por un seguro que te devuelve todo el dinero si cancelas antes de cierta fecha. Eso sí, no dicen si el embarazo cuenta como motivo para cancelar, y tampoco te dejan pasar el dorsal para otro año.
También me gustaría decir que, en mi reciente situación, hablé con el Maratón de Madrid para decirles que no podía correr la media maratón y que sí tenía alguna opción de transferir el dorsal a otra persona para que lo pudiera disfrutar. Me contestaron que esa opción, por fecha, ya no era posible, pero que si enviaba un informe médico que notificara que estaba embarazada, me hacían la devolución del 90% de la inscripción por lesión, tal y como dicen sus normas.
En mi opinión, y ya que sabes que en este espacio me gusta hablar sobre la participación femenina en diferentes eventos, creo que una de las soluciones para fomentar la participación de mujeres en carreras sería la siguiente:
1. Políticas específicas de embarazo y posparto
Las carreras deberían incluir el embarazo como causa válida para:
- Cancelar la inscripción y recuperar el dinero.
- O bien, aplazar la participación uno o varios años sin penalización.
2. Flexibilidad con los dorsales
Permitir posponer el dorsal (como hacen Chicago o Londres) por al menos una o dos ediciones. No todo el mundo puede retomar el running a los 3 meses de dar a luz, y eso debería entenderse.
3. Visibilidad y comunicación
Que estas políticas no estén “escondidas” ni sujetas a discreción por correo. Deberían estar en el reglamento, visibles, claras y accesibles.
4. Sensibilización en el mundo del running
Los organizadores, sponsors y federaciones deberían asumir que la maternidad forma parte de la vida de muchas corredoras y que apoyar esa etapa no es un privilegio: es equidad.
Creo que si los grandes maratones ya lo están haciendo, los nacionales también pueden.
Creo que me he quedado bien a gusto hablando de todo esto, ¿no?
Aunque aún es un poco pronto, tenía ganas de contar mi nuevo estado por aquí, porque ahora, forma parte de mi día a día.
RECOMENDACIONES SEMANALES
En este apartado te recomiendo series, artículos, podcast, libros o algo que me haya gustado por si te apetece verlo a ti.
📚 Libro: El descontento, de Beatriz Serrano. La historia trata sobre Marisa, una mujer treintañera que trabaja en una agencia de publicidad en Madrid. Para sobrellevar su día a día, se refugia en pastillas y vídeos de YouTube. Es un retrato generacional real.
🎥 Serie: Amigos y vecinos, en Apple TV. Cuenta la historia de Andrew Cooper, un ejecutivo que tenía la vida perfecta: éxito profesional, una familia y una vida de lujos hasta que le despiden y se divorcia. Para poder seguir manteniendo su alto nivel de vida, empieza a robarle a sus vecinos ricos y descubre secretos sobre ellos.
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PD: Robinson Crusó... y lo atropellaron.
SARA